La interpretación de carta natal
La carta natal no es en sí un método de adivinación, aunque sí puede usarse para ello. En realidad, se trata de un método de conocimiento de uno mismo.
Muchas personas no saben qué esperar cuando acuden a un astrólogo. El astrólogo conoce los artquetipos, la interpretación general (o más bien las interpretaciones posibles) de un planeta en un signo determinado. Por ejemplo, sabe todo lo que puede significar Saturno en Capricornio en casa V. Esta información la utiliza para tratar de contextualizar en la vida de la persona cuáles de esas situaciones se está dando. Es lo que se conoce como los mitos personales de cada uno.
Es lo mismo que sucede con otras profesiones. Yo como psicóloga sé lo que es un determinado trastorno, pero no puedo saber cómo ese trastorno está afectando en concreto a la vida de la persona que tengo delante consultándome hasta que no me lo dice.
Una vez se conocen los mitos personales del cliente, es cuando podemos pasar a asesorarle de un modo más específico. La carta es el mapa, que nos marca tanto una debilidad como puede ser un Júpiter mal aspectado, como fortalezas que conociéndolas nos ayudan a suavizar las debilidades.
Sería muy poco inteligente no tener en cuenta la situación de cada persona cuando interpretamos la simbología de la carta natal. Imagínate alguien que vive en un país en guerra con pocos recursos y tiene el parte de fortuna en casa II, es imposible que para esa persona ese parte de fortuna signifique lo mismo que para alguien nacido en el primer mundo. Probablemente si nació en una familia pobre de ese país en guerra, el parte de fortuna en la casa de la economía lo que va a significar es que para él es más sencillo encontrar recursos que para el resto, probablemente va a pasar menos penurias que las personas de su entorno pero difícilmente tendrá lujos como podría llegar a tener alguien con parte de fortuna en casa II y que haya nacido en otro país.
La realidad de cada persona actúa en conjunto con la carta natal, determinando cómo se materializan esas influencias. Por eso, los astros inclinan pero no determinan. Y también por eso, actuando en la realidad podemos suavizar las influencias astrológicas.
