Definir la personalidad de tu negocio – Los planetas transpersonales
En las sesiones con personas que quieren emprender un negocio tenemos en cuenta la carta del negocio, así como miramos cuáles son las mejores fechas para iniciarlo o para dar pasos importantes como crear la web, darse de alta…Esto son aspectos formales, sin embargo, hay otros aspectos a los que tendemos a dar menos importancia cuando son igualmente relevantes.
Estoy hablando de la personalidad de tu empresa, que obviamente está en su carta natal reflejada, y que dado que tú decides cuando nace puedes elegir que tenga unos aspectos más conformes con lo que quieras manifestar. La personalidad es un conjunto de rasgos que te diferencian del resto, y también es para algunos autores cómo te ven los demás. Ambas cosas van ligadas.
En astrología se considera que hay tres tipos de personalidad generales. Las personas Urano, las personas Plutón y las personas Neptuno. Después el resto de planetas de la carta natal definen obviamente también tu personalidad y además pueden hacer que seas alguien con una personalidad mixta, entre dos energías de las 3 de esos planetas. Un primer paso para definir cómo quieres que sea tu empresa es ver cómo eres tú puesto que lo que tú transmitas en tu negocio y la ocupación que tengas debe ser compatible contigo. Es como hacer una sinastría entre dos personas, solo que una de las personas es un negocio.
De forma general, se considera que Urano es alguien innovador, rompedor, que va siempre a la última moda e incluso que marca las modas. Neptuno corresponde a soñadores, idealistas, humanistas…Y Plutón es personas fuertes y que han resurgido de sus cenizas como el ave fénix, en algunas ocasiones incluso varias veces en su vida. Esto traducido a la empresa o negocio nos define a negocios que sean innovadores, que están súper presentes en RRSS y que siempre están a la última. A aquellos más orientados al coaching, al encuentro espiritual o el autoconocimiento, o bien que tienen labor social, sería Neptuno. O bien aquellos negocios que te ayudan a transformarte y no seguir siendo el mismo, y no necesariamente tengo que estar hablando de coaching como verás con el siguiente ejemplo.
Este ejemplo es de una consulta, de una persona que quiere emprender un negocio en el mundo del turismo. Está en su etapa inicial así que aún se puede plantear cuáles son las mejores fechas para cada cosa y qué personalidad quiere dar a su negocio. Después de ver en función de sus tránsitos cuáles eran los mejores momentos para obtener financiación, pasamos a definir tres estilos, para que ella vaya desarrollándolos, para elegir cuál le gusta más, y a la vez que eso le ayude a definir características de su público diana. En el ejemplo los tres estilos eran:
Urano: Empresa dedicada al turismo joven, para personas activas, que quieran viajar a ciudades grandes para acontecimientos importantes, sea del mundo de redes sociales, videojuegos, moda….Y para salir de fiesta. También deportes de aventura, en caso de turismo más rural. En base a esto ya vamos haciéndonos una idea de cómo será el cliente y también de cómo debe dar ella la imagen en la web y redes sociales. Usando todas las redes sociales a su alcance, incluso las más nuevas, siendo de las primeras en usarla, llevando lo último en ropa, conociendo todos los movimientos sociales de cada momento…
Neptuno: Sería un turismo para personas un tanto alternativas y que lo que necesitan es descansar y recargar pilas. Neptuno siempre me ha recordado al personaje de Phoebe de Friends, o de Luna Lovegood en Harry Potter. El turismo en este caso sería para estar en contacto con la naturaleza o para vivir algún tipo de encuentro de meditación, retiro de yoga…También entra en esta categoría los SPA, saunas, tratamientos de belleza, balnearios…
Plutón: En este caso estamos hablando de personas que buscan una experiencia que les cambie la vida. Como el típico viaje a la India del que las personas vuelven cambiadas por dentro y a veces también por fuera. Me imagino al jefe de este negocio como alguien que diría «yo antes me dedicaba al mundo de la bolsa, hice un viaje porque mi vida no me llenaba, no podía disfrutar de nada y eso me cambió mi modo de ver el mundo y me hizo encontrar mi pasión en el mundo del turismo» o también como alguien que nos cuenta su historia de superación, de cómo superó enormes deudas y ahora tiene una actitud diferente frente a la vida y al trabajo. De este modo estaríamos vendiendo una experiencia transformadora a personas que así lo quieran, ya sea porque sientan un vacío en su vida o porque quieran desintoxicarse de alguna dependencia o adquirir mejores hábitos.
